miércoles, 15 de abril de 2009

Papeleo

Cuando tu nueva oficina es el hogar, la mayoría de las personas que te rodean piensan que tienes más tiempo libre (error, tienes mucha chamba, te tardas más porque es más fácil distraerse) Ese fue el caso de mi querida hermana quien amablemente, solicitó mi ayuda para realizar en horas hábiles, los trámites para obtener su cédula profesional.

Así que ayer martes salí temprano (aunque los anuncios de la nueva y renovada burocracia, te hacen pensar en un mundo maravilloso, decidí llevar copias de más) Llegué a las oficinas, tomé turno, entregué los papeles y todo estaba completo. Me citaron al día siguiente después de las 12 para recoger el dichoso papelito. Todo fue extrañamente rápido.

Hoy, llego, feliz y sonriente por el éxito obtenido el día anterior y oh! decepción, al acercarme a la ventanilla de entrega, el trámite estaba detenido porque le faltó un cero a la hoja del formato 5 de SAT y que para agilizar todo (¡aja!) tendría que llenar por triplicado una nueva forma del SAT por la cantidad de $1.00 (un peso, como lo leen) por corrección de clave.

Lo que ayer parecía el paraíso de la legalización de títulos y cédulas profesionales; hoy se convirtió en el infierno de los formatos, filas y pagos. Pero sigo viva, acabé el mandado y el próximo año ya tengo mi propuesta para ganar el concurso del trámite más inútil.

PD. Recordé a Mike Wazowski

4 comentarios:

zocadiz dijo...

jajajaja que horror.
Empezaré a trabajar desde mi casa y no quiero que me suceda que piensen que tengo más tiempo libre!!!!

gamaliel dijo...

La burrocracia, uno de los defectos de nuestra sociedad... pero ¿que haríamos sin ella?

Por otro lado... bendita mi universidad que se encargó de todos los tramites posteriores a la titulación y me entregó en un solo paquete titulo y cedula... solo por eso la amé...

Un abrazo

América Gutiérrez dijo...

Zocadiz, te aconsejo no divulgar que tu tranquilo hogar se convirtió en tu oficina, no dejará de sonar el teléfono y no será para invitarte a una fiesta.

Gama, a mi también me cobijó mi Alma Mater, claro que a cambio de una módica cantidad, pero lo valoro igual que tú.

El Velvet de Cierto Pelo dijo...

Idiocracy!