miércoles, 21 de enero de 2009

Mala costumbre

Estaba mal acostrumbrada a que mi trabajo estuviera a menos de un kilómetro de casa. Salía con 15 minutos de anticipación, tenía tiempo de pasar por un jugo y de pensar en todo aquello que de un momento a otro aparecería escrito en este blog. 

Aunque mis asesores había recomendado que descansara este mes, no les hice caso (que raro, dirán desilusionados) y tomé un proyecto que durará tres meses. Así que ya estoy trabajando, en un lugar bastante entretenido y para algunos “glamouroso” Cómo no quiero entrar en detalles sobre este proyecto “quiquis” cómo lo llamaría Juan Evers, les cuento que frijol en el arroz de esta chambita temporal es que tengo que viajar a Polanco. 

Esta travesía harto cansada para una ciudadana del sur (del país y del DF) resulta desesperante. Había olvidado lo que significaba manejar el periférico a las antes de las 9 de la mañana (con un coche estandar, o sea que el esfuerzo es físico y mental) la radio (90.9 o 105.7 a ratos) hace que el trayecto se más leve.

Maniobrar, ajustar los espejos, encomendarse al señor para que el conductor de atrás note las intermitentes y permita que te estaciones en el único lugar disponible. Quizá estoy exagerando, siempre he tenido mucha suerte con estas cosas prácticas. Lo tomaré con filosofía o probaré con el metro ( la bicicleta hasta acá sería suicidio).

He experimentado malos días, pero han sido más los buenos. He conocido personas muy agradables, aunque claro como en toda caja de cereal nunca falta una sorpresa. La balanza está equilibrada, eso es lo importante. 

PD. Me pone de buen humor escuchar a Santogold. Ya quiero empezar mis clases de batería, tener las baquetas “pro” (L gracias por regalármelas) inmaculadas y vírgenes me provoca ansiedad. Ya llegará mi tiempo de “make some noise”.

4 comentarios:

gamaliel dijo...

bueno pues yo retome la sana costumbre de tocar la guitarra, quiza algun dia nos aventemos un desafinado palomazo...

zocadiz dijo...

ya se!!! estuve en el mismo shock cuando regrese al df después de 2 años en provincia. pero a todo te acostumbras!!! menos a no comer, diría mi madre. yo trabajo en polanco! me agrada esta zona!!!

Anónimo dijo...

Atravesar la ciudad es sólo para profesionales, Santi pone de buen humor a muchos!

América Gutiérrez dijo...

Gamaliel, cuenta con el palomazo. más bien dame tiempo para aprender.

Zocadiz, que bueno que disfrutas Polanco, a mi se me sigue haciendo súper caótico, los bueno es que solo andaré tres meses por esos rumbos.

Uliguldipolesis, me he propuesto lograr la profesionalización peatonal estos meses y me da gusto que el sentimiento de buen humor sea mutuo.